Receta de Larb de Pollo Tailandés

Pollo: Carne de pollo picada, preferiblemente pechuga o muslo.

Cebolla roja: Cebolla finamente picada para añadir un toque crujiente y dulce.

Salsa de pescado: Condimento salado y umami esencial en la cocina tailandesa.

Jugo de limón: Jugo fresco para añadir acidez y frescura.

Azúcar: Un toque de dulzura para equilibrar los sabores.

Chile rojo: Chile picado para añadir picante.

Hojas de menta: Hojas frescas para un sabor refrescante.

Cilantro: Hierba fresca picada para un toque de frescura.

Lechuga: Hojas para servir el larb de pollo.

Para obtener un sabor más profundo y auténtico, tuesta ligeramente el pollo picado en la sartén antes de agregarlo a la mezcla. Esto le dará un toque ahumado que realzará los sabores del larb. Además, asegúrate de que la salsa de pescado sea de buena calidad, ya que es un ingrediente clave que aporta umami al plato.

• pollo picado - Sustituir con pavo picado: El pavo picado tiene una textura y sabor similares al pollo, y es una opción más magra.

• cebolla roja - Sustituir con chalota: La chalota tiene un sabor más suave y dulce, similar a la cebolla roja.

• salsa de pescado - Sustituir con salsa de soja: La salsa de soja puede proporcionar un sabor umami similar, aunque no será exactamente igual.

• jugo de limón - Sustituir con jugo de lima: El jugo de lima tiene un perfil de sabor ácido similar al jugo de limón.

• azúcar - Sustituir con miel: La miel puede agregar dulzura y un toque de sabor adicional.

• chile rojo - Sustituir con jalapeño: El jalapeño tiene un nivel de picante similar y puede ser más fácil de encontrar.

• hojas de menta - Sustituir con hojas de albahaca: La albahaca fresca puede proporcionar un sabor fresco y aromático similar.

• cilantro - Sustituir con perejil: El perejil tiene un sabor fresco y puede ser una alternativa para aquellos que no disfrutan del cilantro.

• lechuga - Sustituir con repollo: El repollo puede proporcionar una textura crujiente similar y es una buena opción para envolver.

• Para almacenar el larb de pollo, primero asegúrate de que el pollo picado esté completamente frío antes de transferirlo a un recipiente hermético. Esto evitará la proliferación de bacterias y mantendrá el sabor fresco.

• Coloca el larb de pollo en un recipiente de vidrio o plástico con tapa hermética. Si es posible, utiliza recipientes de tamaño adecuado para minimizar el espacio de aire, lo que ayudará a mantener la frescura.

• Guarda el recipiente en el refrigerador. El larb de pollo se mantendrá fresco durante unos 3-4 días. Antes de servir nuevamente, asegúrate de mezclar bien para redistribuir los sabores.

• Si deseas congelar el larb de pollo, coloca el pollo picado cocido y mezclado en una bolsa de congelación con cierre hermético. Asegúrate de eliminar la mayor cantidad de aire posible antes de sellar la bolsa.

• Etiqueta la bolsa con la fecha de congelación para llevar un control del tiempo. El larb de pollo se puede congelar hasta por 2 meses sin perder su sabor y textura.

• Para descongelar, coloca la bolsa de larb de pollo en el refrigerador durante la noche. Evita descongelar a temperatura ambiente para prevenir el crecimiento de bacterias.

• Una vez descongelado, calienta el larb de pollo en una sartén a fuego medio hasta que esté bien caliente. Añade un poco más de jugo de limón y salsa de pescado para revitalizar los sabores antes de servir.

• No congeles las hojas de lechuga ni las hierbas frescas como la menta y el cilantro. Estas deben añadirse frescas al momento de servir para mantener su textura y sabor.

• Si prefieres, puedes almacenar las hojas de lechuga y las hierbas frescas por separado en el refrigerador, envueltas en papel de cocina húmedo y dentro de una bolsa de plástico perforada. Esto ayudará a mantenerlas frescas por más tiempo.

• Calienta una sartén a fuego medio y añade un poco de aceite de oliva. Agrega el pollo y revuelve constantemente hasta que esté bien caliente. Esto ayudará a mantener la textura y los sabores frescos.

• Usa el microondas: coloca el larb de pollo en un recipiente apto para microondas y cúbrelo con una tapa o papel film. Calienta en intervalos de 30 segundos, removiendo entre cada intervalo, hasta que esté bien caliente.

• Si prefieres un método más suave, puedes calentar el larb de pollo al baño maría. Coloca el larb en un recipiente resistente al calor y ponlo sobre una olla con agua hirviendo a fuego lento. Remueve ocasionalmente hasta que esté caliente.

• Para una opción rápida, puedes usar una vaporera. Coloca el larb de pollo en un plato y ponlo en la vaporera durante unos minutos hasta que esté bien caliente.

• Si tienes una freidora de aire, puedes calentar el larb de pollo a 180°C durante unos 5-7 minutos. Esto le dará una textura ligeramente crujiente sin resecarlo.

• Para mantener la frescura de las hojas de lechuga, calienta solo el pollo y los demás ingredientes, y sirve sobre hojas frescas justo antes de comer.

• Sartén: Para cocinar el pollo picado a fuego medio hasta que esté bien cocido.

• Bol grande: Para mezclar el pollo cocido con los demás ingredientes.

• Cuchillo: Para picar finamente la cebolla roja y el chile rojo.

• Tabla de cortar: Para tener una superficie segura y limpia donde picar los ingredientes.

• Cuchara de madera: Para mezclar todos los ingredientes en el bol grande.

• Cucharas medidoras: Para medir con precisión la salsa de pescado, el jugo de limón y el azúcar.

• Tazas medidoras: Para medir la cantidad correcta de hojas de menta y cilantro.

• Plato grande: Para servir el larb de pollo en hojas de lechuga.

Prepara los ingredientes con anticipación: Pica la cebolla roja, el chile rojo y el cilantro antes de comenzar a cocinar. Esto te permitirá trabajar de manera más eficiente.

Usa pollo pre-picado: Compra pollo picado en lugar de picarlo tú mismo. Esto ahorra tiempo y esfuerzo.

Mezcla los condimentos antes: Combina la salsa de pescado, el jugo de limón y el azúcar en un bol pequeño antes de añadirlos al pollo. Así, puedes asegurarte de que los sabores se distribuyan uniformemente.

Utiliza hojas de lechuga listas para servir: Compra lechuga que ya esté lavada y separada en hojas. Esto te ahorra tiempo en la preparación.