Receta de Pan Plano de Lentejas

Lentejas: Legumbres ricas en proteínas y fibra, que deben ser remojadas durante la noche para facilitar su mezcla.

Agua: Utilizada para mezclar con las lentejas y crear una masa suave.

Sal: Añade sabor a la masa de lentejas.

Para obtener una masa aún más suave, deja reposar la mezcla de lentejas y agua durante unos 10 minutos antes de licuar. Esto permitirá que las lentejas absorban más líquido y se ablanden, facilitando el proceso de licuado.

• lentejas - Sustituir con garbanzos: Los garbanzos también son legumbres ricas en proteínas y fibra, y tienen una textura similar cuando se remojan y se muelen.

• lentejas - Sustituir con frijoles negros: Los frijoles negros tienen un perfil nutricional similar y pueden proporcionar una textura y sabor comparable en el pan plano.

• agua - Sustituir con caldo de verduras: El caldo de verduras puede añadir un sabor adicional al pan plano sin alterar significativamente la textura.

• agua - Sustituir con leche de coco: La leche de coco puede aportar una textura más rica y un sabor ligeramente dulce, ideal para variaciones más exóticas del pan plano.

• sal - Sustituir con tamari: El tamari es una salsa de soja sin trigo que puede añadir un sabor umami profundo y salado al pan plano.

• sal - Sustituir con sal marina: La sal marina puede ofrecer un perfil de sabor más complejo y natural en comparación con la sal de mesa común.

• Deja que el pan plano de lentejas se enfríe completamente a temperatura ambiente antes de almacenarlo. Esto evitará que se forme condensación y se vuelva húmedo.
• Para almacenar en el refrigerador, coloca el pan plano en un recipiente hermético o envuélvelo en papel film. Se mantendrá fresco durante 3-4 días.
• Si prefieres congelar, coloca hojas de papel pergamino entre cada pan plano para evitar que se peguen entre sí. Luego, guárdalos en una bolsa de congelación con cierre hermético.
• Etiqueta la bolsa con la fecha de congelación. El pan plano de lentejas se puede congelar hasta por 2 meses sin perder su sabor ni textura.
• Para descongelar, simplemente saca la cantidad deseada del congelador y déjalo reposar a temperatura ambiente durante unos 30 minutos, o caliéntalo directamente en una sartén a fuego medio-bajo hasta que esté caliente.
• Si deseas un pan plano más crujiente después de descongelar, puedes tostarlo ligeramente en una sartén o en el horno durante unos minutos.
• Evita recalentar en el microondas, ya que puede hacer que el pan plano se vuelva gomoso.

• Microondas: Coloca el pan plano de lentejas en un plato apto para microondas. Cubre con una toalla de papel húmeda para evitar que se seque. Calienta a potencia media durante 1-2 minutos, revisando a mitad del tiempo para asegurarte de que no se sobrecaliente.

• Sartén: Calienta una sartén a fuego medio. Coloca el pan plano de lentejas en la sartén y calienta durante 1-2 minutos por cada lado hasta que esté caliente y ligeramente crujiente.

• Horno: Precalienta el horno a 180°C (350°F). Coloca el pan plano de lentejas en una bandeja para hornear y calienta durante 5-10 minutos, o hasta que esté completamente caliente. Puedes cubrirlo con papel de aluminio para evitar que se seque.

• Tostadora: Si tienes una tostadora de ranura ancha, puedes calentar el pan plano de lentejas directamente en ella. Ajusta la tostadora a una configuración media y tuesta hasta que esté caliente y crujiente.

• Vaporera: Coloca el pan plano de lentejas en una vaporera durante 2-3 minutos para calentarlo suavemente sin perder humedad.

• Licuadora: Para mezclar las lentejas con el agua y la sal hasta obtener una masa suave.

• Sartén: Para cocinar la masa de lentejas y dorar ambos lados.

• Colador: Para escurrir y enjuagar las lentejas remojadas.

• Cuchara: Para verter una porción de la masa en la sartén.

• Espátula: Para voltear el pan plano y asegurarse de que ambos lados estén dorados.

Planifica con anticipación: Remoja las lentejas la noche anterior para que estén listas al día siguiente.

Usa una licuadora potente: Una buena licuadora te ayudará a obtener una masa suave más rápido.

Precalienta la sartén: Asegúrate de que la sartén esté caliente antes de verter la masa para que se cocine de manera uniforme.

Haz varias porciones a la vez: Si tienes una sartén grande, cocina varios panes planos al mismo tiempo para ahorrar tiempo.

Almacena en el refrigerador: Puedes guardar los panes planos cocidos en el refrigerador y recalentarlos cuando los necesites.