Receta de Batido de Kale y Plátano

Kale: Un vegetal de hoja verde lleno de nutrientes, perfecto para batidos.

Plátano: Aporta dulzura natural y una textura cremosa al batido.

Leche de almendras: Una alternativa láctea sin lactosa que añade un sabor suave y cremoso.

Miel: Un endulzante natural que complementa los sabores del batido.

Para obtener una textura aún más suave en tu batido, asegúrate de congelar el plátano antes de licuarlo. Esto no solo mejorará la consistencia, sino que también hará que tu batido esté más frío y refrescante sin necesidad de añadir hielo, lo cual podría diluir el sabor.

• kale - Sustituir con espinacas: Las espinacas tienen un sabor más suave y son igualmente ricas en nutrientes como el hierro y las vitaminas A y C.

• plátano - Sustituir con mango: El mango aporta una textura cremosa similar y un dulzor natural que complementa bien el batido.

• leche de almendras - Sustituir con leche de coco: La leche de coco ofrece una textura cremosa y un sabor ligeramente dulce que funciona bien en batidos.

• miel - Sustituir con sirope de agave: El sirope de agave es un edulcorante natural que tiene un índice glucémico más bajo que la miel y es igualmente dulce.

• Para almacenar el batido de kale y plátano, vierte la mezcla en un frasco de vidrio con tapa hermética. Asegúrate de llenar el frasco hasta el borde para minimizar la cantidad de aire en el interior.
• Guarda el frasco en el refrigerador. El batido se mantendrá fresco por hasta 24 horas. Agítalo bien antes de servir para recombinar los ingredientes.
• Si deseas congelar el batido, vierte la mezcla en bandejas de cubitos de hielo. Una vez congelados, transfiere los cubitos a una bolsa de congelación con cierre hermético.
• Etiqueta la bolsa con la fecha de congelación. Los cubitos de batido se pueden almacenar en el congelador por hasta 3 meses.
• Para disfrutar del batido congelado, simplemente coloca los cubitos en una licuadora y mezcla hasta obtener una consistencia suave. Añade un poco de leche de almendras si es necesario para facilitar la mezcla.
• Alternativamente, puedes dejar que los cubitos se descongelen en el refrigerador durante la noche y luego agitar bien antes de servir.
• Evita volver a congelar el batido una vez descongelado, ya que esto puede afectar la textura y el sabor.

• Coloca el batido en un vaso apto para microondas y caliéntalo a potencia media durante 30 segundos. Remueve y repite si es necesario hasta alcanzar la temperatura deseada.
• Vierte el batido en una cacerola pequeña y caliéntalo a fuego bajo, removiendo constantemente para evitar que se queme o se formen grumos.
• Si prefieres una opción más rápida, utiliza un calentador de bebidas eléctrico. Simplemente sigue las instrucciones del dispositivo para calentar el batido de manera uniforme.
• Si tienes una licuadora con función de calentamiento, puedes usarla para calentar el batido. Solo asegúrate de seguir las instrucciones del fabricante para evitar sobrecalentamientos.

• licuadora: Para mezclar todos los ingredientes hasta obtener una mezcla suave.

• cuchillo: Para picar el kale en trozos más pequeños.

• taza medidora: Para medir la cantidad exacta de kale y leche de almendras.

• cuchara medidora: Para medir la cantidad exacta de miel.

• vaso: Para servir el batido una vez esté listo.

Prepara los ingredientes con anticipación: Lava y pica el kale y pela el plátano la noche anterior.

Usa una licuadora potente: Asegúrate de que tu licuadora sea lo suficientemente fuerte para mezclar todos los ingredientes rápidamente.

Mide los ingredientes antes: Ten lista la taza de leche de almendras y la cucharada de miel para ahorrar tiempo.

Congela el plátano: Si prefieres un batido más frío, congela el plátano previamente.